Izquierda Unida Canaria (IUC) exige un plan de choque a la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias para reducir las listas de espera del Hospital General de La Palma. Las cifras conocidas la semana pasada, 3.030 pacientes en lista de espera, 855 esperando una operación y el mayor retraso de toda Canarias en especialidades como Digestivo (643), Dermatología (972) y Neurología (595), demandan una actuación inmediata de la Consejería de Sanidad.
Como denunciamos el pasado mes de diciembre es necesario aumentar el número de profesionales que atienden estas especialidades, así como el personal complementario necesario (enfermeros/as, celadores/as, auxiliares, etc...) para revertir esta dramática situación. Los recortes en sanidad matan, por lo que es urgente actuar en el Hospital General de La Palma, ya que de lo contrario sólo aquellos pacientes con recursos económicos acudirán a la medicina privada para una cita que se les retrasa hasta el infinito en la Sanidad Pública.
Por otra parte, desde IUC exigimos al Gobierno de Canarias la adopción de medidas urgentes para combatir la Hepatitis C en el Archipiélago. Se podrían estar produciendo entre diez y catorce fallecimientos mensuales en las Islas que serían evitables. Gracias a la labor de Riccardo Cuffardi, impulsor de la Plataforma de Afectados en La Palma, hemos conocido en nuestra isla la gravedad de la situación, que según algunas fuentes, puede afectar a más de 3.000 palmeros y palmeras. IUC plantea que, en primer lugar, deben armonizarse urgentemente los criterios de prescripción de los medicamentos más eficaces contra la Hepatitis C en toda Canarias. No es aceptable que algunos centros hospitalarios no prescriban los costosos medicamentos necesarios mientras esperan a que se publique una guía oficial para el tratamiento de la enfermedad.
Para IUC, a pesar de la propaganda del Gobierno de Canarias por vendernos la inexistencia de recortes en los servicios públicos de nuestra Comunidad Autónoma, como la Sanidad, los propios datos oficiales de la Consejería desmienten el discurso oficial. Para Izquierda Unida la salud es un derecho y no una mercancía, por lo que defendemos un sistema sanitario público y universal, integral, solidario y de calidad.
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