 |
| Fuente: www.aridane.org |
De esta manera, la inclusión de partidas como consecuencia de mociones aprobadas en plenos anteriores y las diversas aportaciones de los partidos políticos en el Consistorio fueron despachadas con un “bastante hemos tragado”, que demostró la visión instrumental de la participación y la elaboración colectiva que tiene el Partido Popular.
A pesar de que el Partido Popular sabía con antelación la negativa de los distintos Grupos Políticos a votar a favor de su propuesta de incluir dos cargos de confianza más prefirieron seguir adelante, aumentando la partida presupuestaria prevista, para forzar un debate en el que por momentos perdieron las formas, con una actitud beligerante y amenazante hacia la oposición a la que hacían responsable de la falta de personal en servicios públicos esenciales para el municipio. Para IUC no pueden calificarse de esenciales servicios como el de Fiestas o Alcaldía, donde el PP pretendía incorporar dos personas de su confianza.
Por otra parte, respecto a la propuesta de asignación de retribuciones a concejales por asistencia a órganos colegiados, IUC ha realizado varias veces esta propuesta que en el marco de la negociación presupuestaria fue asumida, sin más, por el PP, incluso aumentando los órganos por el que se indemnizaría, ya que nosotros sólo planteábamos Plenos y Comisiones y no Junta de Gobierno y de Portavoces. Se trata simplemente de cumplir con el artículo 75.3 de la Ley de Bases de Régimen Local, y de permitir que los trabajadores y trabajadores, independientemente de su capacidad económica puedan desempeñar tareas de representación política.
Posición de IUC ante los Presupuestos 2016
La actitud de los dos concejales de IUC en la negociación de los presupuestos fue la de participar activamente en las reuniones de trabajo, plateando abiertamente nuestras propuestas, pero también nuestras críticas. Defendemos que la dotación económica para la creación de un Banco de Tierras, el desarrollo de políticas de vivienda, con una cuantía muy inferior a la que consideramos necesaria, la inversión en la red de abastecimiento de agua o el aumento de la dotación económica del Ayuntamiento para cofinanciar planes de empleo con el Gobierno de Canarias, ante la imposibilidad de contar con uno propio, contribuyeron a aumentar el perfil social, aunque todavía muy insuficiente de las cuentas de Los Llanos de Aridane.
La actitud de los dos concejales de IUC en la negociación de los presupuestos fue la de participar activamente en las reuniones de trabajo, plateando abiertamente nuestras propuestas, pero también nuestras críticas. Defendemos que la dotación económica para la creación de un Banco de Tierras, el desarrollo de políticas de vivienda, con una cuantía muy inferior a la que consideramos necesaria, la inversión en la red de abastecimiento de agua o el aumento de la dotación económica del Ayuntamiento para cofinanciar planes de empleo con el Gobierno de Canarias, ante la imposibilidad de contar con uno propio, contribuyeron a aumentar el perfil social, aunque todavía muy insuficiente de las cuentas de Los Llanos de Aridane.
Al tratarse de un Presupuesto condicionado por el Plan de Ajuste y por la Ley de Estabilidad Presupuestaria, que dejan un mínimo margen para plantear un política económica alternativa, la posición de IUC se centró en proponer disminuir las partidas que considerábamos sobredotadas para no reducir, e incluso ampliar, las que mejoraban la calidad de vida de los vecinos vecinas del municipio.
Unas cuentas que gracias a las aportaciones de todos los partidos representados nos parecieron mejores que las de 2015 y que decidimos no rechazar, absteniéndonos, aunque mostrando nuestra disconformidad en el excesivo gasto en fiestas (325.000€) o en subvenciones a entidades deportivas (119.850€) concedidas arbitrariamente, lo que demuestran la falta de prioridades en el gasto de los responsables municipales.
Por todo ello IUC en Los Llanos de Aridane rechaza la soberbia mostrada por el Grupo de Gobierno, incapaz de asumir críticas o sugerencias y de no aceptar, 8 meses después del inicio de la legislatura, la existencia de un gobierno en minoría que no puede imponer su programa sin consenso porque no cuenta con los apoyos suficientes para ello.
